El territorio organizado entorno  del actual paseo de la Zona Franca había sido un espacio predominantemente agrícola, que recibía la denominación de la Marina de Sants.

La inauguración del canal de la infanta en el año 1819 va a significar la sustitución de las antiguas técnicas por las de regadios y la concentración de la mayoría de tierras en manos de grandes sociedades agrícolas como la Compañía Agrícola Catalana o la Societat de Credit Agrícola Catala , que van a desecar la zona para convertirla en una zona de pastos.

La disponibilidad de terrenos y de agua , así como de las buenas comunicaciones con la ciudad a través de las carreteras del  Port y del Morrot , va a atraer a muchas industrias durante todo el siglo XIX, sobretodo a partir de la prohibición en el año 1846 de la instalación de fábricas dentro de Barcelona. A finales del siglo XVIII  habían iniciado las actividades industriales con la aparición de los primeros prados de indianas , atraídos por las grandes extensiones de tierras y la disponibilidad de agua que ofrecía la zona.

Can Tunis y el puerto de Barcelona

A principios del siglo XX , los huertos, los campos, las masías y el barrio de pescadores de Can Tunis van a ir dando paso al puerto, a la industria y a los diferentes núcleos urbanos. El paseo de la Zona Franca es hoy la vía principal del barrio, que en realidad es un mosaico de barriadas, algunas de ellas muy chiquitas, nacidas en diferentes épocas y circunstancias tales como el Port, Can Tunis, Cases Barates Eduard Aunós, Can Clos, Polvorí, Ferrocarrils Catalans, Foment, San Cristofol, Estrelles Altes, la Vinya, Plus Ultra, Santiveri, Colonia Bausili.

Este barrio agrupa la única parte poblada y para otros muy desconocida de la montaña de Montjüic, junto a un sector del polígono de la Zona Franca. La remodelada plaza de Cerdá en la puerta sur de la ciudad y a la derecha el parque de Can Sabaté, rodeado de los edificios del paseo de la zona Franca lo hacen único.